En esta entrevista el PhD Jason Moser, nos cuenta acerca de sus estudios y nos da algunos tips para Mejorar nuestra vida, todo con base en las Neurociencias.
P: ¿hablarse a uno mismo en tercera persona atenúa los marcadores neurales del procesamiento de la emoción negativa?
R: Sí, atenúa. Normalmente hablamos en persona uno mismo sin nombre. Así que si me digo “Jason” como cuando hablo con otra persona. Así que, si generalmente me refiero a mis sentimientos, pero yo digo a «Jason» creo un poco de distancia entre mi mente y mi cuerpo, así que creo que mis sentimientos y pensamientos actúan como si pensara en alguien más. Como dando consejos a alguien más, porque usar el nombre se hace cuando uno piensa en otra persona. Esto crea una diferencia sutil, porque eso hace la gente en la vida cotidiana asesorando a un amigo, cuando se habla con un amigo de alguien mas, hablamos con el en tercera persona y esto se usa mucho también con actores, gente famosa habla en tercera persona, creamos la misma distancia en la propia experiencia y nos sentimos un poco mejor, así que si nos basamos en lo emocional, y podemos hacer lo mismo en experimentos de ciencia cerebral con emociones básicas estimuladas exteriormente con la memoria de la gente sobre sus últimas vivencias cuidándolos y hacemos el mismo procedimiento sobre fotos de vivencias de terceros y utilizando su propio nombre como lo hace con terceros y apenas siente un poco la distancia y sentimos lo mismo sobre lo negativo en la experiencia propia.
P: ¿escribiendo sobre nuestras emociones cuando estamos en un estado de ansiedad, hace nos ayudan a reducirlo?
R: Sí, escribir sobre la experiencia, si normalmente se escribe sobre una experiencia traumática en el pasado y decir lo que creo que me paso y transcribir en ese papel la experiencia, la persona comienza a sentirse mejor sobre esa experiencia, le da al papel un tipo de valor acerca de esa situación para seguir adelante. Empezamos a trasladar que pensamos sobre el futuro, por ejemplo, si yo estuviera realmente preocupado por esta entrevista, antes de entrar, escribo en un papel todas mis preocupaciones acerca de la entrevista y vuelco las preocupaciones sobre el papel, sacándolas fuera, esto me permite estar aquí con ustedes sin ansiedad.
P: En otro estudio que has hecho, mencionas que existe evidencia sobre la humildad intelectual de los niños. ¿Brevemente que podes contarnos sobre esto?
R: La humildad intelectual es característica e interesante sobre cómo piensa la gente sobre su propia intelectualidad. ¿Crees que eres muy inteligente o crees que no eres tan inteligente?, encontramos gente muy arrogante y gente más humilde y en general personas que son más humildes tienen mejor interacción con familiares y amigos o compañeros de trabajo y observamos cómo podemos medir esa humildad o arrogancia en el proceso en los niños de edades entre ocho y dieciséis, identificando algunas habilidades emocionales en los patrones del cerebro que puedan decirnos sobre niños pequeños que son humildes o muy arrogantes acerca de su propia inteligencia. A partir de mirar los resultados obtuvimos datos realmente interesantes, ya que, los niños que no son tan inteligentes según el test IQ son quienes creen que son realmente inteligentes. Así que ahí tuvimos una paradoja distinta en este proceso con los niños arrogantes, ¿qué papel juegan los padres? Y como de padres humildes o arrogantes el resultado es distinto también, porque los padres humildes intelectualmente tienen hijos arrogantes intelectualmente y analizamos el tipo de relaciones de numerosos de mecanismos, que hace que alguien piense que es muy arrogante o como hacer que alguien sea más humilde, más consciente.
P: ¿y éstos comportamientos afectan sus habilidades en la vida?
R: Esta es la idea, viendo los resultados, que es humilde, que es arrogante y que efecto tiene esto sobre tu habilidad de aprendizaje, como te comunicas, cómo ves tu propia experiencia y que crees sobre el cambio, los niños humildes son más conscientes en cierta información de movimiento, en pensamientos diferentes. Personas que son intelectualmente arrogantes no lo piensan así porque su disposición a escuchar u obtener nueva información es distinta y esta disposición es la cambia realmente el resultado. Así que, si tenemos un niño intelectualmente humilde habrá adultos intelectualmente humildes, más productivos para la sociedad y mucho más inteligentes emocionalmente, con mejores relaciones interpersonales y la gente que tiene cambios tiene una perspectiva diferente y que trabajo pone en movimiento, tiene más armonía colaborativa e interdependencia en el pensamiento, teniendo en cuenta al otro pregunta ¿qué te parece? y ¿qué creo yo? Desde allí ¿que tenemos en común? y así proyectamos las mismas cosas.
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