El trance es un estado mental, como tantos otros que tenemos durante el día. Una persona en trance se encuentra altamente motivada. También en trance se aprende de su parte inconsciente de manera interior y directa. Esto es lo que llamamos trance desde la visión de la hipnosis eriksoniana que vemos en Programación Neurolingüística.

 

¿Alguna vez soñaste despierto? ¿Alguna vez viajaste durante horas sin tener noción de dónde estás? ¿Y de golpe te das cuenta? ¿Alguna vez te quedaste obnubilado con un paisaje, sin darte cuenta?

 

Se diferencia de la hipnosis clínica reparadora, en que son estados hipnóticos que se dan de forma natural y que pueden ser utilizados para diferentes usos, como el cambio de hábitos, modificación de estados emocionales, resolución de conflictos, logro de objetivos, mejora de la vida en general. Lo importe es tener una intención clara y concreta para su utilización.

Al darse de forma natural y tener en cuenta el mapa ajeno, o bien las representaciones que cada persona puede hacerse desde el lenguaje, se da en un ambiente controlado, en el que la persona que pasa por este tipo de trances es quien ejerce este control. Esta naturalidad hace que a veces ni siquiera nos demos cuenta que estamos en ese trance.

 

Esto que acabamos de preguntar, se trata de diferentes niveles de trance que contienen distinta intensidad. Surge de manera espontánea.

 

El poder del lenguaje vago descansa en el hecho de que logramos poner a la gente en un estado distinto. Distrae a la gente del mundo exterior y entonces les es más fácil conectar con el mundo interior.

 

Cuando hablamos en lenguaje vago, le damos la posibilidad a nuestros oyentes de encontrar respuestas propias.

Evitamos, como decimos en programación Neurolingüística, meter nuestro propio mapa.

De esta forma, la persona que nos escucha puede explorar dentro de sus posibilidades. Una de las frases acertadas que podemos escuchar es “tu inconsciente es más sabio que mis palabras” De esta forma permitimos al inconsciente de cada encontrar sus propias resoluciones.

 

Es muy interesante recordar también que “toda hipnosis es autohipnosis”, motivo por el cual queda claro que también la podemos utilizar en nosotros mismos y cuando le estamos hablando a otra persona de esta forma (con lenguaje vago), también nosotros nos estamos escuchando. Además esta premisa nos garantiza que nadie puede ser inducido a trance si no otorga su permiso para ello. Nuestro propio inconsciente nos cuida de ello, con diferentes tipos de alertas. Ninguna inducción que vaya contra nuestro sistema de creencias y valores puede ser aceptada por nosotros, entrarían en funcionamiento nuestras alertas. El limite a estas técnicas lo proporcionamos nosotros mismos.

Hipnosis Eriksoniana

Uno de los primeros trabajos de Grinder y Bandler, realizaron varios trabajos de investigación junto a Milton Erikson y sus métodos. Las técnicas terapéuticas que obtuvieron con estas investigaciones se volcaron en el libro “Patterns of the Hypnotic of Milton H. Erikson”.

Estos estados pueden utilizarse para profundización y desbloqueo de aquello que una persona esté atravesando, esto, se obtuvo de las investigaciones de la utilización terapéutica llevada a cabo por Milton Erikson en sus sesiones y como fueron surgiendo los patrones que el fue desarrollando y utilizando con la gente que trataba.

 

Como también estos patrones fuera de la utilización terapéutica tienen muchas formas de utilización como comunicación eficaz.