Se acerca la Navidad, y en la calle se ve cientos de personas que corren y se amontonan en los negocios para hacer las compras de sus regalos. Buscan el regalo ideal para sus familiares, sus amigos o compañeros de trabajo. Se preguntan: ¿qué le gustará a mi esposa? ¿a mi jefe que le compro? ¿le gustará esto que le llevo a mi hijo? Y en medio de esa vorágine de compras, no olvidarse de nada ni de nadie a la hora de visitar comercios y locales. Pero a veces nos quedamos encerrados ahí, sin ver que hay otros tipos de regalos que podés hacer aprovechando estas fechas. Si querés entregar algo más que regalos materiales en esta Navidad escuchá estos tips que te invito a llevar a cabo.
El valor del tiempo

El tiempo es lo más preciado que tenemos, y ya que es un recurso no renovable, la mejor opción es regalarlo a nuestros seres queridos. Durante el ajetreo del año, vivimos corriendo, sin calidad tiempo para entregarles a los nuestros. A veces por cuestiones de trabajo u ocupaciones no podemos darles este preciado obsequio. Así que en estos días planificá alguna actividad en tu hogar con tus seres queridos, jugar con tus hijos o simplemente sentarte a conversar con ellos. Tené en cuenta que se trata de tiempo de calidad, porque muchas veces estamos en nuestra casa mirando el celular o navegando en nuestra computadora.

La sonrisa es la mejor manera de comunicar algo

La rutina diaria nos suele dejar agotados y sin energía: desde que comienza el día no hacemos otra cosa que cumplir con la escuela, nuestro trabajo, los hijos y una larga lista de actividades en la que se nos va el día. Todo esto agrega una fuerte carga de estrés a nuestro cerebro y terminamos demostrando nuestro mal humor.
Así que te invito en esta Navidad a cambiar el ceño fruncido por una sonrisa que, además de relajarte, influye positivamente en tu bienestar y en tu salud.

Los abrazos acercan y sanan las relaciones

¿Sabías que los abrazos tienen beneficios en la salud física y mental de las personas? Según algunos estudios, abrazar reduce los niveles de ansiedad y estrés, disminuye la presión arterial, relaja los músculos, mejora la autoestima y eleva los niveles de confianza.
Así que a la hora de abrazar no solo te estarás regalando todos estos beneficios, sino que estarás generando un lazo más cercano con aquellos que abrazas.

Serenidad y paciencia

Como padre o madre, sabrás que la paciencia es un recurso muy valioso y que hay que tratar de que nunca se agote. El estrés y el ritmo cotidiano hacen que muchas veces lleguemos a casa con un resto mínimo de esta paciencia. Pero, si hay niños en la casa, sabrás que esto es prácticamente imposible, ya que requieren de nuestra atención, aunque muchas veces, si no estamos de humor, su insistencia nos hace perder la paciencia y por cualquier motivo los retamos o los enviamos a dormir más temprano.
Para Navidad te recomiendo que en lugar de gastar tu energía y tiempo en retar a los niños, les dediques tiempo para convivir y a jugar. Verás que, además de ser una excelente medicina anti-estrés, estarás ayudando a fortalecer los lazos familiares.

Derramá halagos

A veces solemos confundir críticas constructivas con halagos. Muchas veces, lo que necesitan las personas para lograr lo que quieren, es escuchar cosas positivas.
En esta Navidad regalá a tus seres queridos, palabras que los alienten a ser mejores y que resalten sus cualidades. Haceles ver todo lo bueno que tienen, lo mucho que los querés y lo agradecido que estás a la vida porque los tenés a tu lado.
De esta manera no solo tendrás una Navidad de mejor calidad sino que también estarás maximizando tu liderazgo.